Las peores cosas que me han ocurrido en la vida siempre han transcurrido entre el cumpleaños de mi hermano y el mio. No se por qué.
Hoy se me ocurrio que el clima de septiembre y octubre le da animo a la gente para salir a matar, para morirse, para consumir drogas fuertes y hacer estupideces que van a tener mucha trascendencia en la vida de otros. Esa explicación me parece mas plausible que pensar que mi inexistente angel de la guarda esta de vacaciones por estos dias, ja, no se como la gente puede creer en esas cosas.
Lo que me queda es que la tendencia se ha repetido al menos en 7 años distintos y con sucesos varios que han ido dejando una marca oscura que me hace desear que todo termine de una vez, para que putas vivo si va a llegar un nuevo octubre, para que cumplo años despues de que me ha caido toda la mierda encima, sera que el universo me recuerda que me la voy a tener que aguantar otro año mas mientras me acerco a mi muerte o mientras encuentro fuerzas para pasar todo por alto y saltar de un edificio?
Todo me traga, aunque tragar es inexacto porque siento que me mastica. No puedo dejar pasar todo como lo hacen algunas personas a mi alrededor, no puedo dejar de pensar que hay cosas que amo que se estan sumiendo en la oscuridad. No puedo ser feliz con eso en la espalda, mierda, tampoco era feliz antes de esto.
sábado, 11 de octubre de 2008
La pantera
Del deambular de las barras se ha cansado tanto
su mirada, que ya nada retiene.
Es como si hubiera mil barras
y detrás de mil barras ningún mundo hubiese.
El suave andar de pasos flexibles y fuertes,
que gira en el más pequeño círculo,
es como una danza de fuerza en torno a un centro
en el que se yergue una imponente voluntad dormida.
Sólo a veces se abre, mudo, el velo
de sus pupilas. Entonces las penetra una imagen
que recorre la tensa quietud de sus músculos
y en el corazón se desvanece y muere.
Rilke.
No creo que haya sido pura coincidencia la escritura de este poema, no creo que Rilke se haya quedado viendo la pantera y se imaginara ese tipo de cosas solo por lo que le transmitía el animal, como lo haría quien describe un árbol o una piedra. Al contrario creo que el sintió un vinculo con ese animal, algo que lo identificaba. Posiblemente reconoció en esos ojos que veían a través de mil barrotes y tras los cuales no había mundo, sus propios ojos, su propia cárcel, su propia persona.
Creo que eso que le sucedió al poeta es lo que nos sucede a algunos cuando leemos el poema: no vemos un animal por el cual sentir misericordia, nos leemos y figuramos a nosotros mismos entre nuestras miserables prisiones en las cuales giramos infinitamente sin poder escapar, sin percibir el paso del tiempo, pues este se vuelve una masa uniforme que nos ata a un presente eterno.
miércoles, 8 de octubre de 2008
Sabia que no era un domingo convencional, mi sospecha se confirmo dos horas despues cuando me informaron que era lunes.
Asi fue mi vida el fin de semana pasado, me parecía que todos los dias y todas las horas eran un mismo momento en el que me sentía cansado, casi a punto de irme de bruces contra el piso 4 de un apartamento ajeno en Bogotá en el que no pasaban las horas, ni porgresaba el trabajo, ni me sentía despierto, ni dormido, ni feliz, ni trizte.
De esos dias solo quedan recuerdos extraños y un trabajo de tres tomos sobre la............... nada. Seis personas en un apartamento viviendo con un solo fin durante tres dias con sus noches, durmiendo solo retazos mínimos de lo que es el sueño normal en la vida normal de una persona normal, produjeron mucho, pero no son conscientes de ello hasta que el lunes, luego de que se enteran de que es lunes, imprimen 1000 hojas que son anilladas ante sus ojos estupefactos, que ahogan una risa extraña, una risa que no llega a ser feliz, pero que es risa.
Esa risa estuvo saliendo de nuestras bocas y ojos durante nuestra estancia en ese apartamento, que sirvio de instancia para que nuestras vidas se cruzaran. El apartamento es una intersección. Creo que he quedado atado a estas seis personas de manera fuerte, los he conocido en una situación extrema y ellos a mi. Yo mismo me he conocido en demasía.
No recordaba que era capaz de escribir tanto, permanecer tanto tiempo despierto, hacer tantos chistes, cambiar tanto de ánimo, odiar y amar a las personas que tengo al frente en tan poco tiempo.
Todas las ideas posibles pasaron por mi cabeza, interpretaciones del pasado y palnes falsos para el futuro, desempolve como lo he hecho tantas veces mis tendencias de cobarde suicida, que convivieron con las esperanzas de un humanista indecente que en su ridiculo e insensato fondo aun intrenta cambiar al mundo.
Al parecer este fin de semana fue un Aleph de mi vida, todo paso por mi cabeza, por mis oidos, por mis ojos y por mi boca en tres dias que parecen un solo momento compuesto de muchos recuerdos que en este momento no podria ordenar.
Asi fue mi vida el fin de semana pasado, me parecía que todos los dias y todas las horas eran un mismo momento en el que me sentía cansado, casi a punto de irme de bruces contra el piso 4 de un apartamento ajeno en Bogotá en el que no pasaban las horas, ni porgresaba el trabajo, ni me sentía despierto, ni dormido, ni feliz, ni trizte.
De esos dias solo quedan recuerdos extraños y un trabajo de tres tomos sobre la............... nada. Seis personas en un apartamento viviendo con un solo fin durante tres dias con sus noches, durmiendo solo retazos mínimos de lo que es el sueño normal en la vida normal de una persona normal, produjeron mucho, pero no son conscientes de ello hasta que el lunes, luego de que se enteran de que es lunes, imprimen 1000 hojas que son anilladas ante sus ojos estupefactos, que ahogan una risa extraña, una risa que no llega a ser feliz, pero que es risa.
Esa risa estuvo saliendo de nuestras bocas y ojos durante nuestra estancia en ese apartamento, que sirvio de instancia para que nuestras vidas se cruzaran. El apartamento es una intersección. Creo que he quedado atado a estas seis personas de manera fuerte, los he conocido en una situación extrema y ellos a mi. Yo mismo me he conocido en demasía.
No recordaba que era capaz de escribir tanto, permanecer tanto tiempo despierto, hacer tantos chistes, cambiar tanto de ánimo, odiar y amar a las personas que tengo al frente en tan poco tiempo.
Todas las ideas posibles pasaron por mi cabeza, interpretaciones del pasado y palnes falsos para el futuro, desempolve como lo he hecho tantas veces mis tendencias de cobarde suicida, que convivieron con las esperanzas de un humanista indecente que en su ridiculo e insensato fondo aun intrenta cambiar al mundo.
Al parecer este fin de semana fue un Aleph de mi vida, todo paso por mi cabeza, por mis oidos, por mis ojos y por mi boca en tres dias que parecen un solo momento compuesto de muchos recuerdos que en este momento no podria ordenar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)